Ahorra energía cocinando con una caja caliente

A la hora de preparar la cena, la mayoría de nosotros nos limitamos a cocinar nuestros platos en el fogón (o en el horno) hasta que están hechos. Es un proceso bastante sencillo, sin mucho margen de negociación. Al menos, eso crees.
Sin embargo, existen alternativas al uso (y pago) de energía para cocinar sus comidas durante todo el tiempo previsto. Una de estas alternativas es el empleo de una caja caliente, también conocida como olla bruja. Y puedes crear tu propia caja caliente con cosas que encuentres por casa (mejor aún, cosas que de otro modo habrían acabado en el cubo de la basura o del reciclaje).
¿Qué es exactamente una caja caliente?
Una caja caliente es un tipo de aparato de cocina que utiliza aislamiento para retener el calor y ralentizar el enfriamiento de los alimentos. Al cocinar con una caja caliente, se pueden ahorrar costes energéticos porque los alimentos pueden cocinarse a una temperatura más baja durante más tiempo, lo que significa que se necesita menos energía para cocinarlos. Además, una caja caliente también puede usarse para mantener la comida caliente después de cocinarla, lo que significa que no hay que malgastar energía recalentándola.

Tipos de cajas calientes
El tipo de cajas calientes a las que estoy acostumbrado son simplemente cajas de cartón. El cartón es un gran aislante: mantiene frías las cosas frías y calientes las cosas calientes. También se pueden emplear neveras, o cualquier material que sea un buen aislante.
Como ahorrar dinero
El truco para que tu caja caliente funcione es crear unos centímetros extra de aislamiento en el interior, formando una capa protectora alrededor de la olla. Para ello, puedes utilizar toallas o mantas viejas, o incluso guías telefónicas y papel de desecho. Eso sí, no escatimes: tienes que rellenarla bien para sacarle el máximo partido a tu creación.
A continuación, es el momento de echar la comida, todavía en la olla en la que empezó a cocinarse, con la tapa bien puesta. Lo bueno de una caja caliente es que si cocinas parcialmente tu comida y la metes en la caja, se terminará de cocinar lentamente durante las siguientes 6-8 horas. Los manjares más eficaces de la caja caliente son los que se harían bien en una olla de cocción lenta: arroz, legumbres diversas o incluso guisos. Es preferible que no cocines carne con este método hasta que no te hayas acostumbrado, ya que las bacterias de la carne poco hecha o un mal control de la temperatura podrían enfermarte.
Una vez que los alimentos estén bien encajados en las capas de aislamiento, debe cubrirlos con unos centímetros más de aislamiento. Las toallas y las mantas suelen ser las más prácticas, puesto que el proceso de transferencia debe ser rápido para retener el máximo calor posible de la cocción.
A continuación, cierra la caja y déjala así durante todo el día si la empaquetas por la mañana, o toda la noche si empiezas el proceso por la tarde.

Recursos
He aquí algunos enlaces que he encontrado sobre este tema:
- http://www.concursol.santafe-conicet.gob.ar/concursol09/olla-bruja.pdf
- https://docplayer.es/111610970-Enfriamiento-de-olla-en-caja-caliente.htmll
Para terminar
El uso de una caja caliente requiere un poco más de previsión y preparación, ya que hay que esperar a que la comida termine de cocinarse, pero consumirá la mitad (o menos) de la energía que suele necesitarse para preparar sus delicias gourmet, con lo que será respetuoso tanto con el medioambiente como con su bolsillo.