5 trampas lógicas comunes en las que puede estar cayendo
El cerebro humano es una cosa curiosa. Es perfectamente capaz de aprender cosas nuevas, resolver problemas y aplicar la lógica a situaciones complejas. Pero el cerebro también toma atajos, hace estimaciones y conjeturas incorrectas y establece falsas conexiones entre acontecimientos no relacionados.
Lo que resulta frustrante para quienes quisiéramos vivir con lógica es el hecho de que a menudo tendemos a felicitarnos por nuestro pensamiento racional, mientras que el cerebro está cometiendo un error lógico con repercusiones duraderas.
Puede ser muy difícil identificar una trampa lógica mientras se está en medio de una. Pero es importante conocer las formas más comunes en las que el cerebro humano te decepciona, para que estés preparado cuando te encuentres sucumbiendo al pensamiento ilógico.
Aquí hay cinco trampas lógicas comunes que plagan nuestro pensamiento – y algunas sugerencias para superarlas.
1. La correlación no implica causalidad
La correlación se refiere a una relación entre dos cosas. Por ejemplo, las ventas de helados suelen estar relacionadas con las altas temperaturas. Cuando los termostatos suben durante el verano, también lo hacen las ventas de Ben & Jerry’s.
Curiosamente, la tasa de homicidios también sube al mismo tiempo que las ventas de helados. Si caes en la trampa lógica de creer que la correlación significa causalidad, entonces te preguntarás si el helado provoca impulsos homicidas, en lugar de reconocer que tanto los asesinatos como las ventas de helados podrían estar ligados a otra causa, como que las altas temperaturas aumentan tanto la irritabilidad como las ganas de tomar helados.
Muchas teorías conspirativas se basan en la trampa lógica de creer que la correlación significa causalidad. Por ejemplo, la creencia en la relación entre las vacunas y el autismo (que ha sido definitivamente refutada) a menudo se basa en el hecho de que las tasas de diagnóstico de autismo han aumentado junto con las tasas de vacunación. Sin embargo, hay varias posibilidades no causales para esa correlación, incluyendo los cambios en la forma de diagnosticar el autismo y las mejoras en las opciones de atención médica para los niños con el tiempo.
Cómo combatir esta trampa
Cuando vea tendencias que estén correlacionadas de alguna manera, pregúntese si podría haber otro factor que influya en ambas tendencias. Incluso si no es capaz de identificar cuál es ese factor influyente específico, el simple ejercicio de pensar en influencias adicionales puede ayudarle a recordar que la correlación no implica causalidad.
2. La trampa de las alternativas exclusivas
Cuando se nos presentan dos opciones, tenemos la tendencia a asumir inmediatamente que son mutuamente excluyentes. Por ejemplo, el diálogo nacional sobre la cuestión del equilibrio entre el trabajo y la vida personal comienza con la trampa de las alternativas exclusivas. Pensamos en el trabajo y la vida como dos esferas separadas, en lugar de reconocer que todo nuestro tiempo es nuestra vida. Pero vivir y trabajar no tiene por qué ser un juego de suma cero, y pensarlo así puede ser perjudicial para vivir una vida (que incluye una carrera profesional) que se disfrute.
Cómo combatir esta trampa
Quizá recuerdes el bombazo del verano del 2014 de que Hello Kitty no es un gato. Según sus creadores, es una niña. Como prueba, los creadores señalan que nunca se ve a Hello Kitty a cuatro patas, y que camina y se sienta como una bípeda.
Este detalle tan curioso sobre un personaje de dibujos animados tan querido puede servir para recordar que las alternativas no tienen por qué ser excluyentes. Los estadounidenses ven a Hello Kitty y piensan en «gato» por su cara felina, mientras que los japoneses la ven y piensan en «chica» por su ropa y el hecho de que camina erguida. En realidad, ambos tienen razón, porque Hello Kitty es un personaje de dibujos animados de ficción que no tiene por qué ser una cosa u otra. Cada vez que sientas que sólo hay dos opciones mutuamente excluyentes, recuerda a Hello Kitty e intenta ver si hay una opción que permita ambas alternativas.
3. Resolverlo redefiniéndolo
Esta trampa en particular es una forma excelente de dejar de pensar en un problema en lugar de resolverlo. Por ejemplo, digamos que tienes problemas con tus finanzas. Podrías trabajar duro para salir de las deudas y evitar las tentaciones de gasto e invertir, o podrías decidir que sólo la gente superficial se preocupa por el dinero. Si optas por la segunda opción, habrás «resuelto» tus problemas de dinero definiéndote como el tipo de persona que es demasiado moral para preocuparse por el dinero.
Pero resolver algo redefiniéndolo es una buena manera de dar una patada a un problema en el camino, ya que tus problemas de dinero no van a desaparecer sólo porque hayas definido las preocupaciones de dinero como superficiales.
Cómo combatir esta trampa
Revisa tus definiciones de vez en cuando. Robert E. Horn, del Instituto Lexington, señala esta trampa lógica: «Las definiciones nunca son totalmente vinculantes. Los significados se erosionan con el tiempo. Las palabras tienen una validez temporal. Los significados -las relaciones de los conceptos con las palabras- requieren comprobaciones periódicas».
Si has decidido que algo no es un problema debido a su definición – «amigos con beneficios» es un excelente ejemplo-, entonces es una buena idea revisar el significado de tu definición de vez en cuando para determinar si sigue siendo válido.
4. La trampa de los «Forever Changeless» (siempre inmutables)
La trampa de la eternidad es exactamente lo que parece. Tenemos la tendencia a creer que las cosas son como son ahora y como serán siempre. Usted ha sido víctima de la trampa de la eternidad cada vez que se ha sorprendido de lo mucho que ha crecido un miembro joven de la familia desde la última vez que lo vio.
La trampa del cambio eterno es también una de las formas en que muchas personas con altos ingresos pueden meterse en problemas financieros. A menudo asumen que su gran salario continuará para siempre, ignorando la posibilidad de un despido, una discapacidad u otros cambios en la vida.
Cómo combatir esta trampa
Es casi imposible reconocer la suposición de que no cambiará para siempre cuando uno la está haciendo. Por ejemplo, cuando mi hijo mayor no me dejó dormir durante los primeros meses de su vida, creí que la maternidad iba a significar un agotamiento perpetuo durante años y años. Si hubiera examinado realmente esa idea, habría reconocido que mi hijo acabaría cogiendo el tranquillo al sueño. Pero no fui capaz de ver que esa parte de la paternidad tenía un final porque estaba metida de lleno en ella.
Dado que es tan difícil reconocer la trampa de la eternidad mientras estás en ella, la única manera de luchar contra esta trampa es estar abierto a cambiar tu visión de las cosas cuando llega nueva información, y utilizar esa información para crear una visión más matizada de las situaciones.
5. Trampa del proceso-evento
Cuando caes en esta trampa, ves algo que es un proceso continuo como si fuera un único evento. Esta trampa es muy común en cualquier tipo de plan de superación personal, como la elaboración de un presupuesto. La gente suele crear su presupuesto de una sola vez, y se felicita por haber terminado con él. Desgraciadamente, esto ignora el hecho de que un presupuesto debe ser un documento vivo en el que se trabaja regularmente. De lo contrario, cuando las circunstancias cambien (que inevitablemente lo harán), no estarás preparado financieramente.
Del mismo modo, ponerse en forma y organizarse también suele considerarse como algo puntual, en lugar de un proceso. Eso significa que cada vez que intentas mejorar tu vida en una de estas áreas, tiendes a volver a los viejos patrones después de tu gran «evento» de hacer ejercicio/comer bien durante un mes o de limpiar la casa en un frenesí loco.
Cómo combatir esta trampa
Piense en la superación personal como algo similar a la colada. No esperes lavar la ropa sólo una vez. Reconoces que la lavandería es algo que tienes que volver a hacer a diario o semanalmente, o de lo contrario te arriesgas a tener que ir desnudo. Del mismo modo, la superación personal no es algo que se haga una vez. Al igual que la colada, hay que revisarla regularmente y considerarla un proceso continuo.
¿Cómo evitas las trampas de la lógica?